Analistas coinciden en que gira del presidente Maduro no incidirá en la recuperación de los precios del petróleo
Publicado el 11 enero, 2015 en Economía,Económicas,Energía,Impacto,Inicio,Nacionales,Política,Venezuela
La gira que realiza el presidente Nicolás Maduro por China, Rusia,
Arabia Saudita, Irán y Argelia, ha causado diversas reacciones en la
opinión pública. Dos analistas consultados por el Correo del Orinoco evalúan la situación y exponen sus argumentos al respecto.
El politólogo José Rafael Mendoza cree que este viaje tiene una
importancia “geopolítica y estratégica” para Venezuela. “El país
requiere fortalecer y ampliar los lazos de cooperación, intercambio
comercial, y sobre todo las fuentes de financiamiento internacional con
países aliados, para proyectos de inversión en áreas de importancia para
el desarrollo nacional”, apuntó.
Ese apoyo, a su parecer, se traduciría en obras de infraestructura,
tecnología, aumento de la producción industrial y en la atención
puntual, en materia de bienes y servicios, que requiere la sociedad en
este momento coyuntural de la economía nacional.
ENFOQUE DIVERSO
Recalcó que parte de los anuncios hechos hasta ahora por el gobierno
ratifican que distintas empresas estratégicas chinas vendrán o
reimpulsarán, en otros casos, su presencia en Venezuela, “atendiendo al
llamado del país de mejorar y aumentar la producción en áreas
prioritarias.
El Gobierno tendrá, a su juicio, el reto de “establecer una política
planificada para la producción, direccionalidad política clara y
definida para la producción, y cubrir especialmente las áreas que
realmente son prioritarias”, de manera que se puedan mejorar las
condiciones económicas.
Asimismo, indicó que el Ejecutivo deberá garantizar la “existencia de
mecanismos de control y seguimiento, así como de evaluación de los
resultados”, según el plan propuesto, porque de lo contrario se estarían
dilapidando los recursos que se inviertan en el proceso.
“La idea no es que vengan los chinos a producir teléfonos celulares a
gran escala, que inunden el mercado, o motocicletas que terminen de
congestionar el transito automotriz de las ciudades, cuando esa no sería
la necesidad real del país”, sentenció.
PRECIOS PETROLEROS
En el ámbito geopolítico, comenta que mediante el recorrido
presidencial se intenta “reestablecer puentes de negociación” con países
como Arabia Saudita, “para buscar mecanismos a nivel global que
permitan mejorar las condiciones de los precios del petróleo dentro del
seno de la OPEP”.
Sin embargo, para el especialista es “poco probable” que pueda darse
alguna incidencia en la recuperación del precio del barril de crudo en
la cesta OPEP, en el contexto de esta gira, dado que muchos países como
Arabia Saudita “son aliados” de aquellos que vienen propiciando
conflictos mundiales, entre los que se encuentran EEUU y algunas
naciones de la Unión Europea.
A través de estas alianzas, acota, se ha intentado “contener los
avances de países emergentes a escala mundial, que a su vez vienen
posicionándose en los mercados internacionales y logrando niveles de
influencia política en el mundo, como Rusia o Venezuela”.
Recordó que en diciembre del año pasado, el propio presidente Obama
hizo alusión a las acciones emprendidas por los EEUU “para hacer posible
impactos negativos en la economía rusa, con la finalidad de hacer bajar
su nivel de influencia en la región euroasiática”.
En aquella ocasión, agregó, el mandatario norteamericano “reconoció
el impacto de su política para hacer bajar los precios de los
hidrocarburos, casualmente en una época donde históricamente se supone
que existe mayor demanda y consumo de combustible por la temporada
invernal en los países desarrollados”.
IMPACTO POLÍTICO
De acuerdo con el especialista, la incidencia política dependerá del
grado de acuerdos a los que llegue Venezuela y de los beneficios que
alcancen, sobre todo “si se logran obtener las fuentes de financiamiento
requeridas para poder enrumbar el aparato productivo nacional y atacar
los elementos estructurales de debilidad, como la merma de los ingresos
de divisas”.
La obtención de, al menos, gran parte de los objetivos fijados en la
agenda, “que tampoco ha sido muy clara y difundida por el Gobierno
Nacional”, reflexiona, generará un efecto positivo, no solo en lo
político, sino también en lo económico, “ya que el escenario de
incertidumbre sobre la marcha de la economía del país tenderá a bajar”.
Sobre el impacto internacional, mencionó que después de la muerte del
comandante Hugo Chávez el nivel de influencia del país “ha mermado”,
sobre todo en el escenario regional: “Chávez tenía una fuerte
influencia, visión estratégica y posicionamiento mediático, inclusive en
todos los escenarios posibles”.
Señala que además de tener una personalidad distinta a la del líder
bolivariano, Maduro “ha tenido que dedicarse en cuerpo y alma -con
resultados poco alentadores- a atender la situación de crisis nacional”,
que hasta ahora ha sido muy intensa.
Asimismo, el analista encuentra ciertas fragilidades en nuestra
cancillería y en el sistema de servicio exterior, al punto de
calificarlo como “uno de los más débiles de la región”, debido a la
falta de capacitación dentro del cuerpo diplomático. Asegura que este
servicio “siempre se basó en el liderazgo del presidente Chávez, casi
como en todos los demás aspectos de la vida nacional”.
Pese a esta situación, afirma que “Venezuela juega un rol bastante
fuerte, puesto que representa un modelo distinto de desarrollo y avances
en las condiciones sociales que muchos países y regiones ven con cierto
agrado”.
NO HAY EQUILIBRIO
Mendoza no cree que los acuerdos logrados tras la gira sean muy
equilibrados, dado que “nuestra economía no está en condiciones de
establecer acuerdos recíprocos que permitan, por ejemplo, posicionar
productos producidos en Venezuela en mercados internacionales”.
Por el contrario, estima que “lo que se busca son fuentes de
financiamiento para abrir el mercado local a la inversión de empresas
internacionales que pertenecen a capitales provenientes de esos países”.
No obstante, considera que los acuerdos de transferencia tecnológica y
aquellos que induzcan a la reinversión de ganancias en el mismo mercado
nacional, así como al aumento de la producción de bienes y servicios,
“permitirán elevar las condiciones de nuestro modelo económico”. A su
juicio, “habrá beneficios, no puede dudarse, pero el intercambio no será
equilibrado”.
RECUPERAR PRECIOS
Para el politólogo e internacionalista Kenneth Ramírez, la gira
presidencial busca “lograr que se produzca una reunión extraordinaria
entre los países de la OPEP y Rusia, en el primer trimestre de 2015, con
el propósito de analizar los recortes de producción petrolera que
logren recuperar los precios del petróleo que han caído en 50% desde
junio de 2014”.
Señala que si se llegara a producir un acuerdo de recortes de
producción entre la OPEP y Rusia, “los precios del petróleo se
fortalecerían”, pero a su parecer, “la gira del presidente Maduro no va a
tener éxito al respecto, como tampoco la tuvo la gira del excanciller
Ramírez en noviembre pasado”.
Según el analista, este fracaso se debe a que el Mandatario
venezolano “no pudo discutir de este tema con el Presidente Putin, ni
con el máximo responsable en la práctica de la política petrolera rusa,
como lo es el presidente de Rosneft, Igor Sechin”.
PRODUCCIÓN DE ESQUISTO
Mencionó que Arabia Saudita ha dejado claro, a través de la visita
que hizo a la isla de Margarita su ministro de Petróleo, Alí Al-Naimi, a
principios de noviembre de 2014, que no recortará producción a menos
que se produzca un acuerdo entre productores OPEP y No-OPEP.
La demanda petrolera mundial, según comenta, se “encuentra
debilitada” y existe un “importante crecimiento” de la producción
No-OPEP -sobre todo, petróleo de esquistos en EEUU que han aumentado en
3,6 millones de barriles diarios desde 2010-, lo cual “coloca en riesgo”
la cuota de mercado del referido organismo.
Tras el fallido intento de llegar a un acuerdo de recorte en el marco
de la 166° Reunión Ministerial de la OPEP celebrada el 27 de noviembre
de 2014 en Viena, agrega, Arabia Saudita optó por defender la cuota de
mercado, “manteniendo su producción al máximo nivel y reduciendo los
precios de exportación de su crudo”.
El objetivo saudita, esgrime, es expulsar del mercado la producción
de esquisto de EEUU que tiene un mayor costo de producción. “El problema
es que Venezuela sufre un fuerte impacto con la caída de precios”,
aduce.
FINANCIAMIENTO CHINO
Por otra parte, indicó que mediante el periplo presidencial también
se pretende “obtener un préstamo de China que permita atenuar los
impactos de la citada caída de precios, en el marco de la participación
de la delegación venezolana en el Foro Ministerial Celac-China”.
Ramírez, quien además preside el Consejo Venezolano de Relaciones
Internacionales (COVRI), sostiene que China es una potencia emergente
global con la cual “conviene mantener una relación estratégica dinámica”
que, a su parecer, ha logrado mantenerse.
“El conjunto de acuerdos cerrados, de ser finalmente materializados,
pueden contribuir a dinamizar el aparato productivo nacional a largo
plazo. No obstante, cabe reiterar que Venezuela atraviesa una coyuntura
complicada con la caída de los precios del petróleo, que ha venido a
agravar la recesión económica”, enfatizó
La urgencia del momento, argumenta, son las necesidades de
financiamiento a corto y mediano plazo: “Con el precio del crudo
venezolano por debajo de 50 $/Bl, y con pronósticos que indican que
cerrará entre 60 y 70 $/Bl, en promedio, durante 2015, el gobierno
venezolano necesitará un financiamiento entre 15 y 20 mil millones de
dólares”.
NECESIDADES SIN CUBRIR
De acuerdo con el especialista, “en Rusia no se alcanzó nada nuevo”,
mientras que la visita a China tuvo dos aspectos; el lanzamiento del
Foro Ministerial CELAC-China, “que resultó positivo para la
consolidación de la relación birregional”, y la visita de Estado, donde
fueron alcanzados acuerdos que, según declaraciones del presidente
Maduro, suponen 20 mil millones de dólares en inversión y cooperación.
Pero estos solo son acuerdos “que se han visualizado”, señala. De
hecho, recordó que en palabras del propio Dignatario, los mismos están
“cerrados, pero no firmados”.
A partir de esta gira, comenta, se inicia un proceso de visita de
funcionarios y empresarios chinos para empezar a concretar lo que, en su
opinión, “solo son promesas de inversión y financiamiento de proyectos,
pero no un préstamo de emergencia que implique fondos libres de los que
pueda disponer el gobierno venezolano, a discreción, para hacer frente a
los problemas de liquidez debido a la caída de los ingresos
petroleros”.
En consecuencia, agrega que, “aunque son acuerdos que podrían
resultar positivos si logran reactivar el aparato productivo nacional,
no vienen cubrir la urgente necesidad de financiamiento que tiene
Venezuela en estos momentos”.
PÉRDIDA DE PESO
En su opinión, aunque Nicolás Maduro ha continuado con la política
exterior iniciada por el comandante Hugo Chávez, “la falta de un
liderazgo carismático, la crisis económica y los cambios de la coyuntura
internacional, se han traducido en una pérdida de peso específico de
Venezuela en la arena internacional”. A eso suma el nombramiento de tres
cancilleres, desde el año 2013, quienes en su criterio no tienen “la
formación adecuada para ocupar el cargo”.
Afirma que hasta ahora se han mantenido las vinculaciones con todos
los actores, “pero las alianzas han perdido dinamismo”. Dijo que esta
hipótesis quedó evidenciada luego que el presidente Maduro fuera
recibido en Moscú “por un funcionario de segundo nivel”, como el
Vicecanciller de Rusia.
Además vinculó a ese planteamiento el hecho de que el presidente
ruso, Vladimir Putin, no haya visitado a Venezuela en su histórica gira
latinoamericana, efectuada en julio de 2014, que lo llevó a recorrer
Cuba, Nicaragua, Argentina y Brasil.
En la OPEP, añade, “hemos perdido capacidad de negociación al no
haber avanzado con el desarrollo de la Faja Petrolífera del Orinoco,
debido a los retrasos de los proyectos del Plan Siembra Petrolera”.
De igual forma, asegura que ha habido un “excesivo alineamiento” con
Irán, en Medio Oriente, “que ha terminado erosionando nuestra capacidad
de interlocución con Arabia Saudita y las petromonarquías del Golfo”.
Por tanto, a su juicio, “se requiere una revisión de la política
exterior para hacerla más pragmática y menos ideológica”.
“El exitoso modelo brasileño debe ser emulado por Venezuela”
El analista político Kenneth Ramírez aseguró que, pese a la
relevancia que tiene Venezuela en Latinoamérica y la región caribeña, la
dependencia económica que tiene hacia el petróleo le resta
posicionamiento en el escenario internacional.
“Venezuela es una potencia media clave para el futuro de América
Latina y El Caribe. No obstante, nuestra base de poder es demasiado
dependiente del petróleo. Necesitamos un cambio de modelo económico”,
asintió.
Ramírez, quien se desempeña como docente en la Universidad Central de
Venezuela (UCV), sugiere que el presidente Nicolás Maduro “debe tomar
en cuenta el consejo” dado por del expresidente brasileño, Luiz Inácio
Lula da Silva, en una carta enviada el pasado mes de marzo.
Dice que de esta manera el país podrá “pasar a impulsar una economía
mixta”, donde el sector privado tenga un “papel primordial” junto a un
Estado “fuerte y eficiente” para impulsar el desarrollo nacional.
“El exitoso modelo brasileño debe ser emulado por Venezuela en el
marco del Mercosur para consolidar su rol a nivel internacional, y
mitigar nuestra vulnerabilidad respecto a los ciclos de precios del
petróleo. Solo así consolidaremos nuestro destino y tendremos asegurado
un lugar de privilegio en el concierto de las naciones”, enfatizó.
T/ Héctor Escalante
F/ Cortesía Kenneth Ramírez y archivo CO